23.6.11

Una noche cualquiera.

Me fallaron. El llanto estúpido del estúpido que llora. Si es sólo un juego. Es sólo una pelota. No pasa nada.
Se terminó. Nunca más "somos los más grandes", los más ganadores del país, ser parte de algo majestuoso, la antítesis de lo ordinario, lo común, lo intransigente... ahora River es como yo. Común. Mortal. Uno más. No más.
Ahora empieza. Los graciosos, los compañeros, los amigos. Los vecinos de ascensor, el portero basura, los contactos de redes sociales. Hasta algún que otro familiar. Ahora es el momento de ellos. Se regodean en la gloria de simplemente ver caer al más poderoso desde afuera. Siempre es gratificante saber que mataron al gigante.
Un miércoles cualquiera. Lluvioso, obvio, si está todo mal. Los clichés que son clichés porque ocurren siempre. Sentirse así por un partido de fútbol no está bien. Pequeño, avergonzado, idiota. Pará idiota, es sólo un juego. Pará idiota. Creé. Sé fiel. Sé orgulloso. Pensá en las buenas. En todo lo que te dió esa camiseta. Sacá entrada. Andá a la cancha el domingo. Alentá, gritá, perdé la voz y la razón por esos colores. Creé en el milagro. Pero andá sabiendo que el homicidio tiene una pena de prisión jodida.
Tranqui. No pasa nada.




3 Comments:

Anonymous Flying Burrito said...

Bolú, mi más sentidas condolencias.

(No has perdido el toque... dejá el twitter... vos sos la divinidad de las clincher sentences...)

10:13 p. m.  
Anonymous P said...

No, posta que no perdio el toque. Si dejas el twitter me armo una cuenta solo para seguirte. Aguante!

10:53 a. m.  
Blogger Damiano said...

Gracias, me quebré.-

10:38 a. m.  

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