El Shakal de los Restós de Palermo Hollywood

Es sumamente dinámico, joven y moderno. Gusta de pasearse con lo último en tendencias mundiales y sólo escucha música experimental. Su pelaje depende de la estación del año, pero siempre conserva un bronceado artificial, prolijo y cuidado. Almuerza todos los días en un lugar distinto, su celular nunca para de sonar y tiene almacenados millones de gigabites en ringtones. Disfruta de la compañia femenina pero cuando no se siente presionado, es un tanto ambiguo. La Cofradía lo tilda de ser el Shakal más superficial de todos, pero dentro suyo esconde un corazón de poeta. Lo que no tiene, es talento. Pero sí remeras con inscripciones en idiomas extranjeros y gafas de diseñador italiano.